Después de casi cinco mil millones de dólares recaudados a lo largo de ocho películas, la franquicia Fast & Furious presenta el primer capítulo independiente de la saga, con Dwayne Johnson y Jason Statham en sus papeles habituales como Luke Hobbs y Deckard Shaw en FAST & FURIOUS: HOBBS & SHAW.
Desde que en Fast & Furious 7 (2015) se cruzaron los caminos del imponente agente Hobbs (Dwayne Johnson), un leal miembro de los servicios de Seguridad del Cuerpo Diplomático estadounidense, y del solitario mercenario Shaw (Jason Statham), ex miembro de un cuerpo de élite del ejército británico, los insultos, golpes y burlas no han cesado entre ellos para ver cuál de los dos cae antes.
Pero cuando un anarquista mejorado ciber-genéticamente llamado Brixton (Idris Elba), se hace con el control de una peligrosa arma biológica, el mundo se enfrenta a una de sus mayores amenazas. Cuando Shaw se entera de que además Brixton ha derrotado a su hermana, una brillante e intrépida agente secreta del M16 (Vanessa Kirby, la serie “The Crown”), él y Hobbs no tendrán más remedio que dejar su mortal enemistad a un lado para salvar el mundo y derrotar al único hombre capaz de acabar con ellos. Estreno en cines el 2 de agosto.