El universo cinematográfico de Marvel continúa con sus estrenos, y ahora llega el turno de Spider-Man, interpretado por el joven Tom Holland, «Z, la ciudad perdida» (The Lost City of Z).
La sexta entrega de Spidey, ahora con nuevo actor, y ya es el tercero en ponerse en la piel de Peter Parker. Las presentaciones en esta ocasión sobran, ya que su debut fue en “Capitán América: Civil War” (Captain America: Civil War), y justo durante esa experiencia vivida con los Vengadores (The Avengers), es donde la historia se reanuda. Peter regresa a casa, donde vive con su tía (Marisa Tomei). Bajo la atenta mirada de su supervisor Tony Stark (Robert Downey Jr.) Peter intenta mantener una vida normal, pero irrumpe en su rutina diaria el nuevo villano Vulture (Michael Keaton) y con él, lo más importante de la vida de Peter se verá amenazado.
Se agradece que para ser el debut de un nuevo Spider-Man no se cuente de nuevo toda la historia de la famosa “picadura de araña”, y esto hace que desde el comienzo se imponga un ritmo que va en aumento. Atrás quedaron algunas tramas familiares, o visitas a laboratorios de genética. Además de las famosas escenas de Spidey sobrevolando lugares fáciles de reconocer de la ciudad de ciudad de Nueva York mientras mantiene su lucha contra el crimen. Aquí el panorama es distinto, y vemos a un adolescente Peter Parker, saliendo de fiesta por primera vez, y pasando gran parte del tiempo en el instituto y con sus compañeros, como Net (Jacob Batalon). Y todo esto mientras espera la llamada impaciente de Tony Stark, bajo la «tutela» de Happy Hogan (Jon Favreau). Poco a poco va descubriendo que lo tienen “atado”, y quieren que sea un adolescente más, para evitar que se meta en muchos líos y dejando el verdadero peligro a los “adultos”, en este ejemplo a Iron Man.
Del nuevo villano Vulture, interpretado por un últimamente encasillado Michael Keaton, poco se puede contar sin desvelar demasiado de la trama, pero lo cierto es que desde un principio dejan claro sus motivaciones, y su personaje va de menos a más. Y estará acompañado de algunos secundarios, miembros de su banda criminal.
Entre los jóvenes que estudian en el mismo instituto que el protagonista, destacan Michelle (Zendaya) y Liz (Laura Harrier). Y entre los profesores encontramos varios rostros televisivos como Selenis Leyva de “Orange Is the New Black” y Martin Starr de “Silicon Valley”.
Los 133 minutos no se hacen cuesta arriba, quizás esa frescura es gracias al acuerdo que alcanzaron Marvel Studios y Sony Pictures, lo que ha permitido que personajes como Iron Man aparezcan. Además, el humor también está presente, algo que últimamente parece marca de la casa, y que aquí tiene bastante peso, incluso en las escenas finales. Que te deje con ganas de ver más aventuras de Spidey es buena señal, eso sumado a los buenos efectos especiales, al menos dos escenas merecen un revisionado (la del ferry y la que ocurre en Washington D.C.).
Si alguna franquicia requería un reinicio, esta ha sido una buena elección y en el momento oportuno. Cuenta con la dosis justa de varios elementos para entretener, sobre todo para la denominada generación “millennials”. Por cierto, hay dos escenas finales, una durante, y otras tras los créditos.
Nota: 9
«Spider-Man: Homecoming» se estrena el 28 de julio.